Extorsionan a sacerdote

Reaparece ante feligreses el padre Rodolfo Escalante; no tengo nada de qué avergonzarme, dijo y envió el perdón a sus agresores

NAVOJOA.- El presbítero Rodolfo Escalante Morales, celebró ayer al mediodía la misa dominical en la Parroquia del Perpetuo Socorro de la colonia Sonora, utilizando una silla de ruedas y apoyándose en un bastón, por problemas en la columna vertebral. Al concluir la homilía el padre Escalante Morales dirigiéndose a los feligreses, narró los hechos que le sucedieron el pasado miércoles, indicando que a la hora de la comida fue llamado para auxiliar a un enfermo con los santos óleos y al llegar al lugar indicado, debido a que hacía mucho calor, solicitó un vaso con agua y preguntó por la persona que se encontraba supuestamente grave. Después de haber ingerido el agua, reveló que perdió el conocimiento, porque tal vez le suministraron alguna droga y no volvió a saber más de él hasta las 21:00 horas en que fue encontrado desnudo. Al siguiente día reveló estuvo recibiendo llamadas telefónicas en donde lo amenazaban con extorsionarlo y hacer públicas algunas de las fotografías que tenían en su poder. La respuesta fue dijo: "No voy a dar ni un paso atrás, tampoco les voy a dar un sólo centavo, porque no tengo nada de qué avergonzarme y aquí estoy de frente ante ustedes, porque no tengo tampoco nada qué esconder". Añadió: "Desconozco lo que hicieron conmigo, durante el tiempo que estuve inconsciente, por respeto a los niños y a ustedes no voy a dar más detalles públicamente". El titular de la Parroquia del Perpetuo Socorro, dijo aceptar lo que le había sucedido como una prueba que Dios le envió, la cual acepta y se la ofrece, para seguirle sirviendo como un soldado de Cristo". Manifestó sospechar de donde viene todo ello, pero no van a lograr que me calle, seguiré denunciando y actuando como siempre lo hecho e insistió: "no tengo nada de qué avergonzarme ante ustedes". Asimismo, dijo: "Desde aquí con todo mi corazón les envío a mis agresores el perdón y mis bendiciones". Al concluir su explicación la feligresía asistente a la misa del mediodía, en tributo al sacerdote un prolongado aplauso en señal de reconocimiento y de apoyo por la situación que ha venido pasando desde el pasado miércoles. Asimismo, sacerdotes de otras parroquias acudieron durante este fin de semana a brindarle su apoyo y auxiliarlo en la celebración de la sagrada eucaristía, en donde estaban programadas la realización de bodas y quinceaños.